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Una aproximación a la producción religiosa de Antonín Dvořák: el caso del Requiem op. 89

Enrique Lacárcel Bautista | Descargar PDF

El Requiem de Antonín Dvořák (1841-1904) puede considerarse una culminación romántica del género, a medio camino entre el de Berlioz y el de Verdi, con unas dimensiones de tiempo y efectivos casi operísticos (a propósito de esto Burghauser opina que el autor se coloca con su originalidad en la primera línea de la música vocal del romanticismo)(1). Sin embargo puede apreciarse en todo momento una intencionalidad “piadosa”, arropada por la búsqueda de un estilo propio, tan personal como el de Dvořák que no olvida la vertiente germana de la que es tan deudor, y la popular, fuente inagotable de inspiración en su música.

El presente trabajo se divide en tres partes: la primera sirve de contextualización a la composición de la obra; la segunda se centra en la estructura y en diversos aspectos motívicos del Requiem; y la tercera incorpora una lista de versiones discográficas de referencia.


I. CONTEXTUALIZACIÓN

En la primera mitad de la década de 1880, la reputación de Dvořák en Europa había crecido considerablemente tras los éxitos de sus Danzas eslavas, su Sexta sinfonía o el Stabat Mater, lo que propició que recibiera numerosos encargos. Gracias a esto, hacia 1884 se trasladó a Inglaterra donde su obra recibió una especial acogida. En estos años compone La Novia del Espectro (1884) y el Requiem (1890) para Birmingham, la Séptima Sinfonía (1885) para la Sociedad Filarmónica y St.Ludmilla (1890) para Leeds. Esta calurosa acogida tuvo su complemento al recibir un doctorado honoris causa por la Universidad de Cambridge. A partir de 1890 continuó editando nuevas obras en Praga y en Londres, visitó Rusia y en 1891 comenzó a enseñar en el Conservatorio de Praga (donde Josef Suk fue uno de sus alumnos más destacados). Antes de viajar a Estados Unidos (1892-1895) realizó una gira por Bohemia tocando su nuevo Trío Dumky.

Como ya hemos mencionado, el Requiem op. 89 se compuso para Birmingham, más concretamente para el festival de dicha ciudad(2)Dvořák empezó a componerlo a principios de enero de 1890, finalizándolo en octubre del mismo año(3). Se estrenó bajo la batuta del propio Dvořák el 9 de octubre de 1891, publicándose ese mismo año en Londres(4). Tenemos constancia de que en otras ocasiones Dvořák volvió a dirigir la obra: antes de partir a América lo dirigió sucesivamente en Manchester, Olomouc y Praga(5). Posteriormente, y ya en Estados Unidos, hubo nuevas interpretaciones: en la primavera de 1892 con “The Church Choral Society” (que aparece como la primera escucha de la obra fuera de Europa), o en septiembre de 1892 con la orquesta Sinfónica de Boston. Estos datos se citan en la correspondencia privada del músico con amigos personales como S. Lothrop Thorndike, y especialmente una carta de W. S. B. Matthews fechada el 18 de abril de 1893, en la que, con motivo de la interpretación del Requiem unos días antes, alaba la obra incondicionalmente a la par que realiza un breve análisis de éste(6).


II. ESTRUCTURA Y MOTIVOS

El texto empleado es el tradicional texto litúrgico latino, pero dada su extensa duración (unos 95 minutos) no es adecuada para una función religiosa, ni tiene un carácter conmemorativo(7). Más bien podría decirse que Dvořák se sirve del dramatismo del texto para construir un “fastuoso oratorio”, esencialmente música sinfónico-coral sin un determinado valor litúrgico(8).

Armónicamente podemos afirmar con Burghauser que Dvořák divide la obra en dos grandes secciones, que a la vez se dividen en otras dos, estableciendo fundamentalmente dos ejes en torno a las tonalidades de Sib menor y de Fa Mayor. De este modo crea una organización tonal propia de una sinfonía(9). Formalmente, divide la obra en trece secciones que se ajustan a las divisiones que el texto propone (vid. esquema).

Uno de los aspectos más interesantes de la obra son sus relaciones motívicas. Al margen del penúltimo número en el que se toma un motivo que evoca la secuencia gregoriana del Dies Irae(10), encontramos un motivo que sirve, en cierto modo, de leitmotiv para toda la obra:cuatro notas cromáticas sincopadas que son una “reminiscencia” de la fuga del segundo Kyrie de la Misa en Si menor de Bach(11). Este motivo aparece principalmente en las dominantes y especialmente al principio de cada una de las secciones(12). Es un motivo que además Dvořák ya había usado en otras ocasiones como al final de la sexta canción del Op. 83 acompañando las palabras “Oh, ¿cuándo la ola de la vida me llevará lejos de aquí?” ("Koly ach ulna zivota une odnese?")(13), que sin duda tiene especial relevancia en la aplicación en el Requiem: viene a plasmar las preocupaciones, las obsesiones y las “preguntas sobre la propia existencia del músico, ante la vida y la muerte”(14). Dvořák plantea todas estas preguntas en la más alta cumbre de su arte, dando una visión entusiasta y ofreciendo “sencillas respuestas a esas preguntas”(15). Con referencia a este leitmotiv, Basil Smallman, en la edición de 2001 de The New Grove Dictionary, sostiene que su origen son las primeras notas del Introito gregoriano(16). La influencia del folklore bohemio se observa en algunas referencias a melodías populares como en el “Sanctus” o el “Ofertorio”, donde se puede escuchar reminiscencias de un himno medieval checo.

La obra se caracteriza por su fuerte carga lírica. Ésta es especialmente visible en el “Gradual” y en el “Recordare”, así como en algunas secciones del “Confutatis” así como en general en todo el ofertorio(17). Dvořák nos regala dos sublimes clímax en el “Quam olim Abrahae”, con una majestuosa fuga, así como en el “Agnus Dei” que termina, como asegura Smallman, con un final casi etéreo(18).

A continuación proponemos un sencillo esquema que sirva para clarificar algunas de las ideas anteriormente expuestas.

Ver esquema

III. SELECCIÓN DISCOGRÁFICA

Director/orquesta

Wolfgang Sawallisch; Czech Philharmonic Chorus and Orchestra

Intérpretes

Gabriela Benackova, Brigitte Fassbaender, Thomas Moser, Jan Hendrik Rootering

Año

1992

Discográfica

Supraphon

 

Director

Zdenek Kosler; Slovak Philharmonic Orchestra

Intérpretes

Magdalena Hajossyova, Vera Soukupova, Josef Kundlak, Peter Mikulas

Año

2000

Discográfica

GZ 2

 

Director/orquesta

Zdenek Macal; New Jersey Symphony Orchestra

Intérpretes

Krovytska, Wendy Hoffman, John Aler, Beláček

Año

1999

Discográfica

Delos Records

 

Director/orquesta

István Kertész; London Symphony

Intérpretes

Pilar Lorengar, Erzesébet Komlóssy, Róbert Ilosfalvy, Tom Krause

Año

1968

Discográfica

Decca Legends

 

Director/orquesta

Karel Ancerl; Czech Philharmonic Orchestra

Intérpretes

Kim Borg, Maria Stader, Ernst Haefliger, Kim Borg

Año

1959

Discográfica

Supraphon

 

Director/orquesta

Morten Topp; Akademisk Orkester

Intérpretes

Nina Pavlovski, Lotte Hovman, Thomas Poulsen Kragh, Stephen Milling       

Año

1997

Discográfica

Scandinavian Classics




NOTAS

1. Burghauser, J. Klavierauszug des Werkes. Praga: Bärenreiter, 2002.

2. Döge, K. “Dvořák”, The New Grove Dictionary of Music and Musicians. Londres y Nueva York: Macmillan, 2001. p.792.

3. Döge, K. “Dvořák”, The New Grove Dictionary.

4. Ibid.

5. A.A.V.V. Enciclopedia Salvat de los Grandes Temas de la Música, 1986. p.224.

6. Beckermann, M. (ed.) Dvořák and his world. Princeton, N.J: Princeton University Press, 1993.

7. A.A.V.V. Enciclopedia Salvat.

8. Ibid.

9. Longyear, R.M. “Motivic Unity and Harmonic in Dvorak’s Requiem”, In Theory Only, XII/5-6 (1991-1992).

10. Burghauser, J. Klavierauszug des Werkes.

11. Clapham, John. “Dvořák”, The New Grove Dictionary of Music and Musicians. Londres y Nueva York: Macmillan, 1980.

12. Longyear, R.M. “Motivic Unity…”.

13. Döge, K. “Dvořák”, The New Grove Dictionary.

14. Clapham J. “Dvořák”, The New Grove Dictionary.

15. Burghauser, J. Klavierauszug des Werkes.

16. Smallman, B. “Requiem” The New Grove Dictionary of Music and Musicians. Londres y Nueva York: Macmillan, 2001.

17. Clapham J. “Dvořák”, The New Grove Dictionary.

18. Ibid.


Arriba

 

ÍNDICE

Materia

Volverse loco no está al alcance de cualquiera.
Judit Bembibre Serrano y Lorenzo Higueras Cortés

El desequilibrio de la proporción. Mª del Coral Morales Villar y Francisco José Comino Crespo

Acercamiento a la representación plástica de la locura en Occidente. Victoria Quirosa García

Delirio y drama en Daniel Paul Schreber. Sergio Hinojosa Aguayo

Del qué al quién. Ciclotimia, celotipia y psicosis paranoide en Él de Luis Buñuel. José Luis Chacón

Varia

Un ejemplo de análisis de una obra medieval: el madrigal Fenice Fù de Jacopo da Bologna. Enrique Lacárcel Bautista

Una aproximación a la producción religiosa de Antonín Dvořák: el caso del Requiem op. 89 Enrique Lacárcel Bautista

Sobre el problema de la experiencia privada en Wittgenstein. José Eugenio Zapardiel Arteaga

Sobre la Comunidad de de la Diferencia. Sergio Hinojosa Aguayo

Freud, Habermas y la cuestión de la política. Miroslav Milovic

Algunas consideraciones iniciales sobre un crítico del 27: Luis Cernuda. Mariano Benavente Macias

Homo bulla. Notas sobre el último libro de Juan Carlos Abril. Juan José Ramírez

Glosario de (contra)psicología y guía de conversación (I). Abulia. Judit Bembibre Serrano y Lorenzo Higueras Cortés

Galería

Una semana distinta. Marta Iglesias

Lecturas y relecturas

Vespro della Beata Vergine de Claudio Monteverdi. Francisco José Comino Crespo

Al otro lado, con Milena. José Pallarés Moreno

Carta abierta a José Julio Cabanillas con motivo de La luna y el sol. María Ángeles Pérez Rubio

Aulaga de Rafael Juárez. Pablo Valdivia

Ferias de María Salgado
Mª Jesús Fuentes

El dolor de las cosas de Joaquín Rubio Tovar. Enrique Nogueras

El año de la liebre de Arto Paasilinna. José J. Cañas

Los Indomables de Filippo Tommaso Marinetti. Mamen Cuevas Rodríguez

Cuevas de Pilar Mañas. Susana Bernal Sánchez

El Personero. Portavoz y Defensor de la Comunidad Ciudadana de José Rodríguez Molina. Lorenzo Higueras Cortés

¿Qué es lo que pasa? De Agustín García Calvo. LHC

El Hospital Real de Granada. Los comienzos de la arquitectura pública de Concepción Félez Lubelza. LHC